Aunque la duda principal de Gustavo Quinteros, entrenador de Emelec, radica en definir entre Wilmer Zumba y Cristian Arana quién será el portero titular en el Clásico del Astillero de mañana, en el Monumental, aparentemente el nombre del reemplazante del lesionado Luciano Figueroa parece estar decidido: Enner Valencia.

El esmeraldeño de 23 años sustituyó al argentino cuando dejó el terreno, a los 7 minutos, en el duelo contra Macará, en la jornada anterior del campeonato, y marcó el tercer tanto azul en la victoria 3-0.

Según Valencia, cuya inclusión significaría que juegue como volante, cerca de los atacantes Marlon de Jesús y Marcos Mondaini, “el Clásico siempre será un partido aparte, diferente a los demás. Todos queremos jugarlo. Ojalá pueda estar ahí”.

Para el futbolista, a quien Jorge Sampaoli hizo debutar como profesional en el 2010, en un partido de Copa Libertadores ante Newell’s Old Boys, en Rosario, una victoria ante los toreros es clave para aspirar a ganar la segunda etapa y ser finalistas frente a Barcelona.

“Nosotros debemos mantener el nivel que hemos venido mostrando, tratar de aprovechar la oportunidad que tenemos de poder llegar a la final”, comentó Valencia.

Málaga tendría interés

Según la versión digital del diario español Marca, el Málaga, que dirige el chileno Manuel Pellegrini, tendría interés de fichar a Valencia. La emisora del rotativo madrileño indicó que el jugador millonario evitó hablar del tema porque debe centrarse en el partido ante Barcelona, sin embargo, admitió que por intermedio de “un amigo” conversó con Pellegrini.

“Por cuestión de que está por jugarse el Clásico del Astillero nos pidió no hablar, pero sí admitió que por medio de un amigo tuvo contactos con el entrenador malagueño Manuel Pellegrini”, comentó el rotativo.

Mientras, Arana dijo ayer: “Verán de qué estoy hecho”, sobre su eventual titularidad.

La anécdota

En 1955 se jugó el Clásico con más goles; se anotaron 8

Por la fecha número catorce del torneo provincial del Guayas, el quinto del profesionalismo, Barcelona y Emelec se midieron en el Clásico del Astillero que más goles registra en la historia. En el estadio Capwell, el 31 de julio de 1955, los toreros vencieron 5-3.

Sobre el compromiso con 8 anotaciones este Diario aseguró que fue “pródigo en jugadas emocionantes, en goles magníficos y estiradas escalofriantes de los arqueros” y destacó que Barcelona, “luciendo un extraordinario espíritu de lucha, se impuso a un rival que es notoriamente mejor en técnica de juego”.

Diario EL UNIVERSO destacó al argentino Jorge Larraz como “el más alto valor” de los azules, a Simón Cañarte, por sus “terroríficos disparos”, y “la demostración de empuje y bravura de los poderosos rivales”.

Jorge Larraz abrió el marcador para Emelec al someter a Pablo Ansaldo; a los 8 minutos Gonzalo Chalo Salcedo puso el 1-1 al recoger un rechazo de Jaime Ubilla y batir a Cipriano Yu Lee; los eléctricos hicieron su segundo tanto a los 15m, a través de Júpiter Miranda. A los 20m Salcedo convirtió el empate amarillo a 2.

El festival de goles no cesaba y Sigifredo Chuchuca se encargó de poner arriba 4-2 a los canarios, con tantos a los 37m y 40m. Otra vez Miranda acercó 4-3 a Emelec, al terminar el tiempo inicial.

A los 80m, tras pase de Carlos Alume, Simón Cañarte marcó el 5-3. Sobre el final, Mariano Larraz (hermano de Jorge Larraz) falló un tiro penal ante Jorge Delgado, que sustituyó a Ansaldo.
 
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